Carta de Vladimir Carderon Frías II Parte

A pesar de lo evidentemente mostrado por los sufrimientos acumulados, nos enviaron, en unos casos: negación de aprobación de casos por falta de evidencias; o por sugerencias de otras vías migratorias más convenientemente a través de familiares radicados en Estados Unidos de Norteamérica; o  respuesta de denegación definitiva de establecernos como refugiados, y con ello nuestra familia, quedando por esta determinación la decisión del caso cerrado sin intención de tomar ninguna acción adicional; en los casos de revisión también se ha planteado que la solicitud no contenía ninguna información nueva o alegato  de error en la adjudicación de los mismos.

 

Ahora, nosotros preguntamos, ¿ que niveles de análisis, dictamen y­/o revisión, según dado el caso, pudo haber hecho el oficial situado del Departamento de Estado o Buro de Inmigración del Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, para determinar si nosotros como opositores y, primordialmente nuestros familiares pudiéramos establecernos como refugiados bajo la ley de esta misma nación?; que en su aplicación para este Programa de Refugiados declara lo que al principio de esta redacción tuvimos a bien citar. ¿Es que no se hacen las investigaciones establecidas y con el rigor que requieren los casos por el grado de sufrimiento que a consecuencia acumulan los opositores de la sociedad civil cubana y, no tanto ellos como sus familias? Familias estas, que contienen niños y adolescentes inocentes limitados de aspirar desde una guardería infantil hasta el derecho de acceso a un centro de estudio siendo probada su capacidad de preparación educacional para ello. Todo a consecuencia de este vil gobierno imperante en Cuba que los reprime psicológicamente con sus sicarios y esbirros. Entonces, para que nos motivan con un programa que no enmarca salvar la familia de  opositores del peligro a las consecuencias de su lucha que son un  sacrificio para ellos y por propia situación colateral no para su patria, que es su prole.

 

Como los casos referidos, al principio y final de este escrito, hemos presenciado cientos. Diferentes a los mencionados anteriormente, hemos visto casos aprobados para establecerse en los Estados Unidos que no tienen nada de argumentos ni para ser aprobados en primera entrevistas; pero no solo eso, casos de opositores aprobados que han dejado de entregar medios logísticos de trabajo de sus organizaciones, reportadas estas actitudes con anterioridad; también casos que han sustraído dinero de apoyo económico enviado del exterior; otros declarados perseguidos por problemas religiosos que dejan mucho que desear en sus argumentos con la posición adoptada por el gobierno con estas corrientes y los que lo oponen políticamente; un tanto han llegado a territorio de los Estados Unidos: algunos no se la ha visto más, otros cuando han comenzado a trabajar con sus representantes en el exilio hasta han tratado de aprovecharse individualmente hurtando desde allá.

 

Los religiosos que aplican en este programa dicen no inmiscuirse en problemas políticos, y el refugiado enmarca un esencial peso político para su argumento como tal. Esto teniendo en cuenta por citar el caso de una sola religión, a los testigos de Jehová, que sus miembros recogen fechas de vuelo al lado de opositores verdaderamente perseguidos, y desaprobados. Es digno de mencionar que todo el mundo se pregunta cuales serán las pruebas que presentan estos supuestos testigos para ser aprobados, digo supuestos porque todo el mundo conoce que un seguidor de Dios no debe mentir, y en Cuba todo el mundo tiene claro que los únicos perseguidos somos los opositores al régimen, que los testigos de Jehová incluso acuden a las urnas, a según ellos, hacer acto de presencia , pero plasmando su firma, junto con la presencia de su carnet de identidad, por consiguiente, convirtiéndose en parte del juego político de los tiranos, incluso cuando tienen alguna celebración y coincide con una del gobierno, la posponen, ¡no quieren enfrentamientos, están de lo mas amaestraditos!. Debemos mencionar también que los testigos de Jehová tuvieron represión, pero los que las sufrieron fueron los abuelos y en el mejor de los casos,  los padres de alguno de estos que hoy nos restriegan una fecha de vuelo en la cara. Los testigos de Jehová tienen una Watch Tower en los Estados Unidos que les hace llegar toda su bibliografía y demás logística hasta su sede de nombre Betel en la ciudad de la Habana, que esta logística llega a todas partes de nuestra isla sin obstáculo ninguno, que tienen estudios a domicilio libremente, casas de reuniones donde se reúnen sin problemas, salones del reino donde realizan asambleas publicas sin obstáculos ninguno. En fin todo el mundo se pregunta ¿Cómo es posible que aprueben a testigos de Jehová y opositores de bajo perfil y a nuestros líderes acompañados de su carga política nos lo desaprueben? Nadie lo sabe, solo se oyen comentarios de la falta de seriedad del programa, y si está entrando en algún tipo de arreglo con las autoridades porque es obvio que al llamarnos mentirosos a nosotros, ¡que es lo que están haciendo!, les están brindando un apoyo de alguna forma a la policía política cubana. Amén de la falta de seriedad. Cito: no de un hombre, ya es mayoría la que cuestiona el trabajo de los actuales funcionarios de la SINA.

 

Otro detalle, cuantas personas han emigrado a los Estados Unidos, habiendo pactado por concesión el compartimiento de los programas de acción de sus organizaciones políticas o civiles con la seguridad del estado castro comunista cubana. Debemos reconocer que no somos las autoridades competentes para determinar estas contingencias, pero debemos recordar que los que vivimos dentro de Cuba con nuestros miedos y temores, así como, con nuestras propias vivencias somos los opositores cubanos, porque somos los que luchamos contra el régimen castro comunista en el terreno, no algunos de los oficiales situados por el Buro de Inmigración. No creemos haber sido los únicos que por hacer valer ante la nación nuestra responsabilidad social, haya provocado en nuestras familias permitir que el reverso del sueño libertario durante todo este tiempo de enfrentamiento a la tiranía acabara en convertirse en la peor pesadilla para sus críos. Esa es nuestra carga y, la  asumimos continuando nuestra lucha opositora. La carga del Programa de Refugiados son los obstáculos que hace prevalecer actualmente y para lo cual no fue creado, permitiendo con ello, que el pueblo opositor presencie decisiones injustas contra muchos de ellos y sus familiares. Opositores en muchos casos valientes, valiosos, de libre pensamiento y de buenas costumbres; que han sido ejemplo de lucha contra este régimen totalitario, pero que también temen por el desarrollo psicológico, la seguridad económica y la garantía social que deben tener sus familias y que peligran irremediablemente bajo el castro comunismo del gobierno cubano actual.