Los activistas del Partido 30 de Noviembre se vieron imposibilitados de asistir a la Escuela de Desobediencia Civil en donde se reúnen para intercambiar conocimientos que les permitan llevar adelante una lucha adecuada por la libertad de Cuba.
Según Boris Agustín Osorio Ramos, Delegado de la Región Occidental y Profesor de la Escuela de desobediencia Civil, los agentes de la Sección de Enfrentamiento de la Seguridad del Estado (DSE) hostigan constantemente a todos los que intentan llegar a dicha escuela, incluso usando provocaciones y desafíos a los activistas.
Buscan que haya una respuesta para luego acusarlos de Atentado, Desacato o Alteración del Orden y poderlos encerrar como han hecho con otros defensores de los Derechos Humanos que pertenecen a otros movimientos, para poder asistir a estas reuniones los opositores se ven precisados a ir desde el día antes, acoto Osorio Ramos.
Según manifestó Alfredo Fernández Silva, Presidente del Partido 30 de Noviembre, los oficiales del DSE han planteado que ellos no pararán hasta que destruyan la Escuela y que no permitirán el paso de los activistas que no estén dentro de la vivienda a la hora que comienza el operativo donde participan además personal civil del Partido Comunista de Cuba y la Policía Regular.
No obstante al acoso a que son sometidos participaron en la actividad, Aixa Campoalegre Raposo, Guillermo Vilella Tejeda, Frederid Otero Angueira, Elena Milanés Bazán, Tomás Ramos Rodríguez, Nancy R. Zamora Paz, Luis A. Hernández Naranjo, Carlos a. Borrego Galardy, Miguel López Santos, Bárbara Remón Rivero, Yudelkiz Licea Blanco y Boris A. Osorio Ramos.
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