viernes, 30 de marzo de 2012

Injusticia sobre RUEDAS

 Desde que era un niño me han dicho que Cuba es la sociedad más justa que existe, donde mejores y más bellas estan las playas, donde todos sin excepción somos iguales y gozamos de los mismos privilegios, si, una especie de paraiso terrenal, que más puede querer un mortal para dejar decursar sus años de vida, donde mejor uno podría estar, verdad.

 Con el paso del tiempo, por supuesto creci y pude comprobar que es incierto todo lo que nos decian y casi a la fuerza nos inculcaban, no duro mucho en percatarme que era pura ficción y mucho más después de pasar noventa (90) días de "vacaciones forzadas" allá por el año 1997 en el Departamente de Seguridad del Estado Cubana, si en la mistica Villa Marista, la cual devela historias que casi siempre sobrepasan la realidad.

 Pero lo que le puso, como decimos los cubanos, la tapa al pomo, fue mi procesamiento y encarcelación por un Delito de Malversación que dista mucho de ser probado. Fui sancionado a 6 años de prisión por el honorable Tribunal Provincial de Ciudad de la Habana (Audiencia), en la causa 613 del 2007 de la Sala Segunda de lo Penal, y ahí mismo empezo mi calvario, cual no sería mi asombro al leer la sentencia supuestamente elaborada por un Juez Cubano, llena de errores e inconsistencias, muchos señalamientos al "CRIMINAL BLOQUEO YANKEE", pero nada objetivo que me pudiera implicar en el hecho en sí. Luego vino la casación, es un tramite parecido a la apelación, por demás el único que autoriza la desgastada y poco práctica Ley de Procedimiento Penal, por supuesto, la respuesta no se hizo espera, me negaba de plano y ratificaba la sanción, pero algo curioso, los jueces reconocían que la "PENA ESCOGIDA ERA SEVERA".

 Conociendo un poco la Ley pues me encontraba estudiando Derecho en segundo año, me decidi a presentar un Procedimiento de Revisión Penal, para eso recopile pruebas, testimonios y todo lo que pudiera ser útil para esclarecer mi caso, al finalizar tenia un documento de 22 hojas, que en cualquier parte hubiera bastado para declararme inocente, pero no estamos en Cuba. Aprovechando que aún no habia ingresado a cumplir mi pena, fotocopie este material y lo envie al Tribunal Supremo Popular (Máxima Instancia Judicial Cubana) y al Ministerio de Justicia, es decir ambos escritos eran identicos, sentaba todas mis esperanzas en ellos, aunque algunos amigos Fiscales me decian que en el país aceptan 2 o 3 Revisiones Penales al año.

 Al decursar el termino de 90 días que establece la Ley de Procedimiento Penal, mi familia se persono en el Tribunal Supremo para recoger la respuesta, cual no sería la sorpresa, podría demorar un año, molesto por esto a los nueve meses le escribi una carta al Presidente del Consejo de Estado Raúl Castro Ruz, esta Entidad, que siempre hace como Poncio Pilato, le envio la misiva al Tribunal, el cual evidenciando una crueldad incalculable me declaraba No Ha Lugar a mi Procedimiento, aún cuando conocía que violaba la Ley. Pero la gran Sorpresa fue que solo un mes después, el Vice Ministro Primero de Justicia, declaraba el mismo documento Con Lugar y exigia a la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo Popular que "Corrigiera la Calificación Juridico - Penal", para mi no era suficiente, pues se olvidaban de los documentos y las declaraciones, pero a la vez, me sentía feliz pues se haría 50 % de justicia.

 Pero la vida me jugaría otra mala pasada, en un juicio fantasma, cinco jueces del Tribunal, declaraban Sin Lugar la solicitud de la autoridad facultada y me ratificaban la pena, en este acto no comparecio ni el Fiscal, ni el Abogado Defensor y mucho menos el Acusado, que por Ley deberiamos haber estado presente. Para colmo misteriosamente mi expediente de causa fue enviado por error a la Sala de los Delitos contra la Seguridad del Estado y mi sentencia se extravio de la oficina de la Abogado Defensoro, luego de una discusión fue que a los tres meses se me entrego el documento.

 Aunque les resulte incomprensible, todo esto me ocurrio a mi, existen las pruebas documentales y las violaciones son las más fragrantes, conozco pocos casos como el mío, quizas alguien pueda encontrar en la historia alguno, si es así por favor enviemelo.

 Pero no todo ha terminado, la Fiscalia Provincial la Habana, la supuesta garante de la Legalidad, acabo de rematar, cuando en un dictamen copio literalmente las tres sentencias de mi caso y fue la respuesta emitida, cuando me queje ante tal desatino la respuesta a sido el silencio, para colmo el 15 de noviembre de 2011 me diriji en queja a la Fiscalia General de la República, por la cual espero respuesta, y por lo visto nunca me la va a dar, pues hacerlo llevaría implicito reconocer el error cometido y si tu te equivocas todo esta bien, vas pronto a la carcel y ya, pero como cuesta a estos Señores reconocer sus errores.

 Como no queda otra opción o simplemente yo no la veo, he decidido presentar una Demanda por Daños y Perjuicios contra el Fiscal Jefe Provincial que a la larga fue el que firmo el desatinado documento, espero que la lección le sirva a todos, en Cuba no hay justicia y me recuerda el añejo programa de la Televisión "San Nicolas del Peladero", donde todos eran Jefes y nadie Mandaba, empezando por el Alcalde y terminando por el Sargento Arencibia.

(c) Ariel Lázaro Fernández González - Este material se puede reproducir, siempre y cuando se consigne la fuente.

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